Luego que el periodista Alexander Guerrero, grabara el momento en que un grupo de hombres sacaran computadores, impresoras y muebles, enviados por el hasta ese día alcalde del municipio de Magangué, Jorge Luis Alfonso López, fue interceptado en la calle para ser amenazado de muerte. Entre tanto, a pocos kilómetros de allí, el colega Clodomiro Castilla era hostigado en Montería, por su denuncia permanente de actos de corrupción ejecutados por políticos regionales vinculados a los grupos paramilitares.
Cuando el colega Alexander Guerrero, tomó su cámara, el pasado 31 de diciembre, jamás imaginó que su vida estaba a punto de cambiar, por cuenta de la intolerancia que ha dejado cientos de muertos en su región. Recién había recibido una llamada de Anuar Arana Gechem, el alcalde que se posesionaría al otro día y quien lo nombraría jefe de prensa de su despacho, para que grabara el extraño trasteo de implementos de la que iba a ser su oficina.
Alexander arribó al lugar, fue insultado por uno de los colaboradores del ex alcalde, grabó las imágenes mientras los implementos y muebles eran sacados de las oficinas, e inmediatamente las envió a los canales de televisión Caracol y RCN, donde fueron emitidas como noticia nacional.
Dos días después del incidente, a las 11: 30 am, Alexander fue interceptado en la calle, cerca de la casa del Alcalde Anuar, por un colaborador del ex alcalde, quien lo insultó y amenazó de muerte. Luego dos motos se parquearon toda la tarde y parte de la noche, frente a la casa del periodista. Y ante el rumor creciente de que sería asesinado antes del viernes, es decir, hoy, el pasado 15 de enero, el colega decidió huir de la ciudad.
El ex alcalde Jorge Luis Alfonso López, es hijo de una polémica empresaria de la lotería Chance, Enilce López, conocida como La Gata, quien se encuentra detenida por lavado de activos y ha sido cuestionada, públicamente, por sus vínculos con los grupos paramilitares de extrema derecha.
El mismo, cuando era alcalde, se tomó dos meses de vacaciones, cuando se enteró de un operativo del CTI de la Fiscalía en su contra.
Por su parte, en Montería, el periodista Clodomiro Castilla, ha sido víctima de decenas de agresiones desde mayo del año 2005, cuando fuera amenazado de muerte por el Secretario de Salud del Departamento de Córdoba Manuel Troncoso, según consta en denuncia puesta por el colega en la Fiscalía Seccional 13 de Montería. El señor Troncoso es además, cuñado del hoy desmovilizado jefe paramilitar Salvatore Mancuso. El periodista Clodomiro había denunciado la inversión de $825 millones en un censo de perros y gatos, realizado en uno de los departamento mas pobres del país, hecho que involucraba al entonces gobernador Libardo López Cabrales.
El 6 de diciembre de 2006, el colega Castilla presentó denuncia ante el Director Seccional de Fiscalías de Córdoba, contra Maria Cristina Ghisays Martínez, jefe de prensa de la gobernación de Córdoba por cobrar el 30% como comisión por la adjudicación de publicidad estatal. El padre de la entonces funcionaria, Pedro Ghisays Chadid, fue denunciado por el periodista como socio del paramilitar Mancuso.
El 26 de diciembre de 2007, Castilla denunció ante el Comando de Policía de Córdoba, la propuesta del Coronel Mauricio Antonio Medina Guatibonza de dar órdenes para asesinarlo.
Paralelo a su labor informativa, el colega Clodomiro Castilla, ha tenido que padecer amenazas: el corte de la electricidad de la emisora cuando emitía su programa, amenazas telefónicas, la destrucción de los vidrios de las ventanas de su casa, y recientemente, que abrieran troneras en las paredes de su casa y quemaran viva a una de sus perras.
“A quienes amenazan al periodista Alexander Guerrero les decimos: el colega ya está protegido, lejos de sus garras criminales, y la justicia ya está en camino, tras sus huellas, porque en Magangué todo el mundo los conoce”, declaró Eduardo Márquez, Presidente de la Federación Colombiana de Periodistas. “A quienes hostigan el valor civil de Clodomiro Castilla, les comunicamos: sabemos quienes son ustedes, los conoce nuestra organización gremial, los conoce la Federación Internacional de Periodistas, como los conoce la ciudadanía de Montería que, por miedo a su armas traicioneras, guardó silencio sobre sus atropellos; pero no hay miedo que dure cien años, como se los ha demostrado Clodomiro”.